Me llamo Laura Gometz Burgas y quiero contar mi experiencia de como la cirugia de aumento mamario me cambio la vida.
En mi adolescencia veía como se desarrollaban los senos de mis amigas y compañeras de la escuela secundaria, y los míos no crecían, mi madre me decía que tenga paciencia que tendría unos senos grandes como los de ellas y mis hermanas.
El tiempo pasaba y esto no sucedía en relación a mis expectativas, ya a los 17 años me sentía menos mujer, las remeras me quedaban mal, mis amigos me bromeaban diciéndome que de frente era un amigo más.
Estas bromas afectaron mucho mi autoestima, para disimular me compraba corpiños con push-up y rellenaba con algodón, los veranos eran un drama no quería ir a lugares con playas ni ir a piscinas.
Me veía con mis tetas pequeñas una discapacitada física y mental por mi complejo de inferioridad, siempre de mal humor, me sentía en inferioridad de condiciones en relación a mis amigas.
No quería compartir reuniones con mi grupo de amigas, no quería ir a bailar, no quería salir de mi casa.
Envidiaba a las actrices y modelos que se habían operado para aumentar el tamaño de sus senos.
Mi alegría llego cuando me despidieron de mi trabajo en el que me desempeñe por mas de 10 años y me indemnizaron muy bien, solo pensé que no hay mal que por bien no venga.
No tuve dudas que ese dinero seria para poder realiza mi sueño la ansiada cirugia de aumento mamario y asi fue.
Consulte con varios cirujanos plásticos (más de 6 especialistas en aumento mamario), y elegí a el mejor cirujano plástico por su experiencia y formación académica el Dr. Marcelo Bernstein, el cual corrobore que era miembro titular de la Sociedad Argentina de Cirugia Plástica, ente oficial de la cirugia plástica de la Argentina.
Todo fue mas rápido de lo esperado a los 10 días ya estaba operada y tenia mi aumento mamario, no lo podía creer, la cirugia no me había dolido nada, a pesar de que algunas amigas me dijeron su post operatorio no fue bueno.
A la semana de operada mi autoestima cambio rotundamente, era otra mujer y muy feliz, no lo podía creer al mirarme al espejo, para mi fue como un psicoanálisis de resultado inmediato, al verme bien me cambio mi salud mental.
Mis amigos tampoco lo podían creer, ahora me siento una mujer sexy y hermosa.
Este cambio físico, supero mis expectativas, me cambio la vida.