La relación médico-paciente
Por Dr. Carlos Eduardo Vélez E.
Cirujano Plástico - Pontificia Universidad Católica - Brasil
Miembro de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica
En la cirugía plástica están aliados médico y paciente en la lucha por una
existencia mejor en que no solo la vida se rescata o se preserva sino que se
busca fundamentalmente a través de la armonía de la forma exterior establecer
una condición compatible con la dignidad de existir y la felicidad del hombre.
La cirugía plástica presenta características particulares ligadas a las
motivaciones y expectativas no siendo raras las exageraciones propias de los
pacientes y de otro lado el cirujano plástico no debe volverse esclavo de los
caprichos, manías y neurosis tan comunes en la práctica.
Existen dos pilares que mantienen un buen nivel en la relación médico paciente
la competencia y la ética.
La competencia en el sentido del dominio pragmático y técnico de la especialidad
dentro de su momento.
La ética en el sentido de cómo comportarse haciendo no solo en el sentido
material como en lo filosófico que lleva la acción.
La primera consulta
Depende de ella el éxito de la relación médico paciente donde el paciente
necesita ser oído que entiendan sus motivaciones, frustraciones y ansiedad, para
que el medico discuta el problema con interés y honestidad analizando todos los
pormenores sugiriendo y aclarando el tratamiento.
Es necesario estar atento al paciente neurótico para huir de él, al
perfeccionista para no comprometerse con sus caprichos y exigencias, a los
desconfiados que creen estar en manos deshonestas para obtener su confianza o
descartar a los que piden resultados imposibles incitando algunas veces la
vanidad del cirujano.
Estos pacientes deben ser descartados, es mejor perder un cliente al principio
que conquistar un insatisfecho después.
De otro lado el paciente insatisfecho puede finalizar al cesar la causa de la
misma, resolviendo entonces con una buena relación, escuchando, explicar
exhaustivamente y firmemente lo que esta aconteciendo, sin embargo la
insatisfacción tiene causa justa lo mejor conducta es concordar con el paciente
e intentar corregirlo a la mayor brevedad posible.
El paciente que evoluciona bien es el mejor premio que el médico busca en tanto
que aquel que se complica debe recibir por parte del médico la mayor atención,
interés, dedicación, cariño y competencia. No existen mejores manos para su
cuidado que las del medico que lo opero, y en caso de necesidad puede y debe ser
solicitado la opinión de un colega.
Con respecto a los honorarios es bueno saber su significado: lo que se gana con
dignidad y con honor no en tanto no debe anteponerse al lado humano.
Los honorarios devengados por su trabajo no debe ser supervalorando su trabajo
como así mismo no se debe servir con precios viles.
El médico no se debe dejar explotar o engañar por los que se anuncian como
"pobres" y "miserables" para usufructuar ventajas de tipo económico.
Cuando el médico acepta precios viles lo que el paciente busca es una mercancía
barata y no un buen trabajo por parte del médico.
El acto médico no es mercancía que se vende pero el servicio que se presta debe
recibir remuneración.
Fuente:
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